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En la vista panorámica de Candelario destaca la silueta de la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción. E. N.
Municipalismo 360

Candelario, el legado monumental de una villa con todos los servicios

La localidad salmantina cuenta con todo tipo de infraestructuras para vivir en un marco incomparable y para disfrutar haciendo turismo

María Jesús Gutiérrez

Domingo, 1 de junio 2025, 17:04

Candelario es uno de los Conjuntos Histórico-Artísticos de la provincia de Salamanca, declaración conseguida en 1975, y uno de los Pueblos Más Bonitos de España gracias a su legado monumental. Ubicado en la ladera de la Sierra de Candelario, destaca por el entramado de sus calles empinadas y su estética especial salpicada por un buen número de monumentos y recorrida por pequeños canales de agua recogida de las nieves de la Sierra, conocidos como regaderas, que durante años sirvieron para arrastrar los despojos y la sangre de los cerdos en temporada de matanzas.

La ermita del Humilladero y la iglesia de Nuestra Señora de la Asunción son parte de su patrimonio arquitectónico, a los que hay que sumar las fuentes de Candelario, la Casa Consistorial o un elemento propio del municipio que se ha convertido en una de sus señas de identidad como son las batipuertas (media puerta colocada delante de la puerta de entrada de la vivienda para protegerla de las nevadas).

El edificio más sobresaliente de Candelario, que se encuentra en lo alto del pueblo, es la iglesia parroquial construida con una mezcla de estilos: mudéjar, barroco, románico y gótico. Su artesonado es mudéjar y destaca el retablo que cuenta con una alegoría de la Asunción de la Virgen María y también el dedicado a los mártires, del siglo XVI. La primera piedra de la iglesia se colocó en 1329, pero en el siglo XVII se hundió y fue reconstruida a iniciativa del duque de Béjar, cuyo escudo se encuentra en una de sus fachadas.

El retablo de su ermita

De la ermita del Humilladero, situada a la entrada del pueblo y del siglo XVIII, destaca su retablo de madera con una imagen de Cristo, el artesonado, así como la imagen del Flagelado del escultor bejarano González Macías, y la talla de San Vicente.

Por su parte, la Casa Consistorial es una muestra de la arquitectura civil del siglo XIX y conserva en su interior una llamativa escalinata con muros y sillería labrada, y un amplio salón de reuniones; mientras que las fuentes son elementos destacados de la personalidad de la villa, conservándose las tres romanas que había en cada una de las entradas del pueblo: por el Camino Viejo, por los Puentes y por Navacarros, que son conocidas con las fuentes de las Ánimas, de los Puentes y de Lapachares. A estas tres se suman otras once de fechas posteriores que salpican cada rincón del municipio.

No hay que olvidar, el Museo de la Casa Chacinera, que muestra el modo de vida básico en Candelario a finales del siglo XIX y principios del XX.

Fiestas patronales en lo que se lucen los trajes típicos. M. J. G
Batipuerta y regaderas, dos de las señas de identidad del casco urbano.
La iglesia muestra una mezcla de estilos: mudéjar, barroco, románico y gótico.

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Todo este patrimonio arquitectónico se une al patrimonio natural que ofrece Candelario, ya que se encuentra entre pinares, bosques de castaño, riscos de granito, manantiales, regatos y arroyos… y que se puede disfrutar gracias a un buen número de rutas de alta montaña como la que lleva a las lagunas de El Trampal, la de la subida a La Covatilla o la subida a Hoya Moros, de dificultad alta; o las de dificultad baja, ideales para realizar en familia, como son la de La Garganta del Oso, la del Cancho de la Muela o el paseo por la Cruz del Herrerito.

El patrimonio cultural y etnográfico de Candelario, cuyas gentes han sabido conservar y mantener sus tradiciones, también ha hecho muy conocido a este municipio dentro de la provincia de Salamanca y en toda la región. La representación del Belén Viviente o del Vía Crucis en la Cuesta de la Romana o la Boda Típica, declarada como Fiesta de Interés Turístico Regional que recrea todo el ritual de una boda a la antigua usanza y en la que se pueden ver los trajes típicos de Candelario, son tres de sus tradiciones más significativas junto a la celebración de las fiestas de la Candelaria, una de las celebraciones cargada de más tradiciones.

Todo ello convierte a Candelario en un lugar ideal para visitar, para hacer turismo; pero Candelario es mucho más que eso, es un pueblo para vivir y disfrutar. Y para ello cuenta con todo tipo de servicios para que cualquier persona pueda desarrollar su vida personal y laboral con total comodidad. Desde guardería y colegio, Candelario cuenta con consultorio médico, instalaciones deportivas y culturales, tiendas, bares, restaurantes… y ahora «nuestro proyecto estrella, para esta legislatura, es una residencia de mayores», afirma la alcaldesa, Elvira Fernández, completándose así todo el ciclo vital y que las personas de más edad no tengan que abandonar su pueblo. Hay que destacar, por otro lado, la cercanía del municipio con la ciudad de Béjar, a tan sólo cinco kilómetros, que está dotada con todos los servicios que le puedan faltar a Candelario, como hospital en el caso sanitario, institutos y Universidad en el educativo, o museos, en el cultural.

Proveedores de embutido de la Casa Real

Candelario fue famoso en el siglo XIX por sus embutidos, tanto que el rey Carlos IV nombró como proveedor de la Casa Real al chacinero de Candelario conocido como el tío Rico, que además es el protagonista de la obra 'El Choricero' de los hermanos Francisco y Ramón Bayeu y Subías. En 1818 la villa contaba con 107 fábricas. Un pasado ligado a las chacinas que ahora el Ayuntamiento pretende poner en valor con la celebración el 14 y 15 de junio de la I Feria del Embutido de Candelario, con un amplio programa de actividades.

Elvira Fernández, alcaldesa: «Queremos desestacionalizar el turismo»

Elvira Fernández.

Uno de nuestros objetivos, desde que llegamos al equipo de Gobierno de Candelario, fue el de desestacionalizar el turismo realizando actividades a lo largo de todo el año. Somos un pueblo muy activo y queremos descongestionar el verano, en el que Candelario triplica o cuatriplica su población, de forma que tengamos turismo en todas las estaciones del año y si puede ser durante todos los fines de semana, mucho mejor, porque eso significará desarrollo económico para nuestro pueblo.

Con esta idea, hemos realizado actividades de lo más diversas, pero siempre promocionando nuestro entorno y apoyándonos en nuestra riqueza. Iniciativas como, por ejemplo, un concurso de barcos por nuestras regaderas o la creación de un centro de artesanía que dé cobijo a todos los artesanos de Candelario y de los municipios del entorno, fomentando asimismo la creación de una Asociación de Kilómetro Cero para promover el consumo de los productos de nuestra tierra, con la celebración de una feria en otoño; o rutas senderistas de primavera, la carrera arrebatacapas o la Noche de las Velas; sin olvidar todas las celebraciones ligadas a los santos o efemérides señalados como San Antón, la Candelaria, Santa Ana, las águedas, el Día de la Mujer…

Y pensando en el legado que nos dejaron nuestros antepasados, este año celebraremos el 14 y 15 de junio la primera Feria del Embutido, con el fin de poner en valor la importancia que el embutido tuvo en Candelario, que en 1818 tenía 107 fábricas. La historia del chorizo de Candelario se remonta al siglo XVIII, siendo en el XIX cuando alcanzó su esplendor como lo demuestran múltiples documentos y premios que obtuvo. Muestra de ese esplendor es que Candelario fue durante años el proveedor oficial de embutidos de la Casa Real en tiempos de Carlos IV, que nombró al tío Rico como su proveedor. Además, el retrato de dicho chacinero se encuentra en la obra datada en 1786 'El Choricero', cuyo boceto realizado en cartón por Francisco Bayeu y Subías está en el Museo del Prado y un tapiz de su hermano Ramón Bayeu en la Sala de Embajadores del Monasterio del Escorial.

La I Feria del Embutido tratará de dar a conocer la historia de Candelario ligada a las chacinas, pero también la calidad de sus embutidos y la riqueza del municipio con diversas visitas, tanto a la Casa Chacinera como a su entramado urbanístico, sin olvidar otras actividades como un concurso de embutido casero y degustaciones de chorizo. Actividades infantiles, talleres, actuaciones musicales y animación durante ambos días completarán una feria que pretende promover el turismo a mediados de junio, además de apostar por un producto que fue el germen del desarrollo económico y social del municipio.

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